Esta fruta es rica en vitamina C, que es esencial para nuestro sistema inmunológico y, por tanto, protege nuestro cuerpo y nos ayuda a combatir, por ejemplo, los resfriados. Asimismo, mantiene el equilibrio redox de las células y las protege de especies reactivas al oxígeno, que dañan nuestras células y el ADN.
La sandía contiene citrulina, que ayuda a reducir la acumulación de grasa en nuestras células de grasa. Citrulina es un aminoácido que se convierte en arginina con la ayudade los riñones. Cuando nuestros cuerpos absorben citrulina, ésta tiene la capacidad de bloquear la actividad de TNAP(fosfatasa alcalina no específica del tejido), lo que hace que nuestras células grasas produzcan menos tejido graso, y por lo tanto ayuda a prevenir la acumulación excesiva de grasa corporal.